REHABILITACIÓN TÉRMICA


La mitad del gasto que se produce en las viviendas se invierte en climatización (calefacción y refrigeración). En este sentido, la forma más eficaz de lograr que los edificios y viviendas existentes sean más sostenibles es la aplicación de aislamiento térmico.

Desde el mes de octubre de 2006, es obligatorio aislar los edificios cuando se realicen modificaciones, reformas o rehabilitaciones que afecten a más del 25% del total de los cerramientos, siempre que dicha construcción cuente una superficie útil superior a 1.000 m2.

Aparte de lo establecido por la ley, para cualquier edificio de más de 20 años o insuficientemente aislado, se estima aconsejable una rehabilitación térmica con la que podría alcanzarse, fácilmente, un ahorro del 50% de la energía consumida en calefacción y/o refrigeración.


¿QUÉ CONSEGUIMOS MEDIANTE LA REHABILITACIÓN TÉRMICA?

Economizar energía de calefacción y refrigeración reduciendo las pérdidas o ganancias térmicas a través de la envolvente del edificio

Mejorar el confort térmico del interior de la vivienda, evitando la sensación de pared fría

Evitar condensaciones y humedades en el interior de los edificios

REAÍSLA - Rehabilitación energética de viviendas. REHABILITACIÓN TÉRMICA
FACHADAS ESTANCAS AL AIRE Y AL AGUA, TRASPIRABLES

Muchas son las viviendas que, por culpa de malos ajustes entre los diferentes componentes de las fachas o por las diferentes fisuras creadas por los movimientos estructurales, dejan espacios por donde el agua penetra, humedeciendo y mojando el interior de los muros. Estas humedades se reflejan en los tabiques interiores generando hongos y bacterias en las paredes.

Parecido ocurre con el aire. Las fisuras favorecen la entrada de aire desde el exterior hacia el interior por los huecos de persianas, los pasacintas de persianas, los enchufes de luz o incluso por los falsos techos. El aire frio o caliente (según la estación) se filtra en nuestra vivienda alterando el aire interior. Esto genera polvo en suspensión en el aire que respiramos y, por supuesto, provoca pérdidas energéticas y un habitat poco saludable.

NUESTRA VIVIENDA ES COMO NUESTRA SEGUNDA PIEL Y POR TANTO IGUALMENTE IMPERMEABLE, TRANSPIRABLE Y ESTANCA

HUMEDADES POR CONDENSACIÓN

Las humedades por condensación son habituales en viviendas con poco o ningún aislamiento y con puentes térmicos relacionados con la construcción de las mismas. Los puentes térmicos favorecen un contacto directo desde el exterior al interior sin ninguna rotura para evitarlo: el vapor de agua se condensa al encontrarse el CALOR del interior con el FRÍO exterior. En el encuentro de dichas temperaturas se genera un choque térmico en el muro interior, produciendo humedad en las paredes, vaho en las ventanas, moho en pilares, vigas, paredes y techos, etc. Numerosas enfermedades como rinitis, asma, neumonitis de hipersensibilidad o conjuntivitis pueden afectar a los ocupantes de estas viviendas por culpa de la humedad y la propagación de hongos, deteriorando el habitat saludable del hogar.



REHABILITAR UNA VIVIENDA EN BASE A LOS CRITERIOS DE SOSTENIBILIDAD Y EFICIENCIA TIENE RECOMPENSA: UN HOGAR MÁS SALUDABLE, MÁS SOSTENIBLE Y MÁS AHORRATIVO… ¿SE NECESITAN MÁS MOTIVOS?